La cadera es una articulación cóncavo-convexa muy congruente. Combina un amplio rango de movilidad con una gran estabilidad. Es por ello, que la patología traumática que la caracteriza requiere de mecanismos lesionales de alta energía.
La patología degenerativa en la cadera del adulto joven se conoce cada día con mayor exactitud, aunque es más frecuente en el adulto de mayor edad.